Los estudios que se han efectuado demuestran que hay factores que aumentan el riesgo de padecer infarto. Son los siguientes:
-Exceso del colesterol total en la sangre, especialmente del llamado “malo” (LDL), pues el “bueno” (HDL) disminuye el riesgo.
-Presión arterial alta (14-9 o más), sea la máxima, la mínima o las dos; y tanto si siempre son altas, como si sólo lo son a veces.
-Tabaco. Es uno de los factores de mayor riesgo, pero, al año de dejarlo, las complicaciones cardíacas se reducen a la mitad, con independencia del tiempo y cantidad que se haya fumado.
-Obesidad. Un 10% de exceso de peso aumenta un 30% de las posibilidades de infarto.
-Falta de ejercicio físico.
-Padecer diabetes.
-Antecedentes de infarto en la familia, aunque sólo favorecen la acción de los otros factores. Por otra parte, el infarto de miocardio es más frecuente en los hombres, pero, en las mujeres, aumenta a partir de la menopausia debido al déficit de estrógenos.
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